miércoles, 30 de noviembre de 2011
Cuida de ti
Un día deje las palabras en tu lista de cosas que creí que no ibas a utilizar, pero al recordar donde estaba puesta mi libreta encontré un par de palabras escritas con tu puño y letra. Palabras que tocaron en lo más profundo de mis pensamientos, encontré palabras que me hicieron viajar muy lejos. Recuerdos de aquellos atardeceres que se han fusionado con tu esencia y que ahora te tratan suevemente... No sé si estás a muchas millas de mi supuesto planeta o quizás te tengo a la par sin darme cuenta. Lo único que pretendo decirte es que estás aquí o allá; pero estoy contigo. Decirte que simplemente hay momentos que marcan, situaciones que agobian y un par que me hacen sentir la diosa de mi universo.
Hoy como todos los días te recuerdo porque estás en el viento, en el sol que me cobija con sus cálidos rayos, en la brisa que reseca mis labios, en el polvo que se estrella con mi rostro, en los gritos y el bullicio de la gente, en un buen café, en el humo del cigarro, en tu música que es la mía, en las palabras frías y tiernas, en un abrazo, en el si y no. Bueno sencillamente en todo y casi nada.
Eres el amigo que nunca más volveré a tocar, a escuchar, a ver... Pero eres el amigo que forma parte de mi ser para siempre.
Cuida de ti...
miércoles, 19 de enero de 2011
Tu sueño, el que no era mío...
Caí de la cama
el golpe estremeció mis entrañas
fue tan grave
que un ligero rasguño
provoco la pérdida del sueño.
Intente dormir
sin poder conciliarlo
había mucho ruido
una voz áspera y fría
me decía al oído:
Tu sueño, el que no era mío...
Tu sueño, el que no era el mío...
Era como el golpeteo de una gota de agua
en un recipiente lleno
que después de un rato se vuelve insoportable.
Decidí levantarme,
después de un rato
me senté sobre la cama
observe la noche
a través de la ventana
para darme cuenta
que la ventana nunca existió
era solo un recuerdo,
un recuerdo que murió.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)